
Fuera de peligro, Fransua comentó : - ¡Recordadme que nunca más vuelva a abrir la boca! -, y todos se echaron a reír.
Entretanto, Daysy y Xiri no dejaban de reñir entre ellos con ladridos y maullidos. Siguieron su viaje, observando todo lo que veían a su paso: mariposas, mariquitas, estrellas de colores, hojas fluorescentes … La lluvia caía en sus burbujas sin mojarlos, resbalando el agua por el cristal. Era un espectáculo ver todo eso.
Llegaron a un cielo cargado de estrellas y se quedaron mirándolas fijamente. Una de ellas, les sonrió. Anthea dijo : - Mirad aquella estrella. Nos está llamando. Vayamos a preguntar, igual sabe dónde está el cielo que estamos buscando, o quizá sea éste -.Elizabeth sintió un escalofrío por su cuerpo y advirtió que no la gustaba la idea. Anthea la dijo : - Sólo por preguntar no nos va a pasar nada -. Decidieron ir a preguntar, a lo que Ícaro les dijo: - ¡Vale, yo me quedo. Así os cubro por si viene alguien y os aviso -. A los tres niños no les pareció mala la idea, a lo que Fransua le dijo: - Estate atento por si ves algo -. Ícaro, contestó: - Sí, sí. No os preocupéis. Iros tranquilos. ¡Cuándo os he fallado yo,eh! -. Los tres niños se miraron entre ellos y sin decir nada fueron al encuentro de esa estrella. Al llegar a su altura, se empezó a unir con las demás estrellas y se encontraron encerrados, rodeados por ellas, y se vieron envueltos en una nube que les dejó sin ver nada de lo que ocurría a su alrededor. Cuando desapareció esa nube, se dieron cuenta que estaban en un lugar muy extraño y oscuro, y de pronto esa voz : vais a morir. Los niños, sobresaltados, gritaron: - ¡No! - , y apareció ante ellos esa cara de maldad. Fransua dijo: - ¡Eso no te pertenece! -. Esa voz les respondió : es mentira, todo es mentira. Esa pluma es nuestra, nos pertenece. La teníamos guardada para cuando llegue el momento, mostrar la verdad y por eso las luces blancas la quieren, porque ellos no quieren enseñar la verdad y quieren esconderla para así, adueñarse de todo y poder hacer lo que quieran. Os están utilizando para llegar a donde quieren, porque tienen miedo de que nosotros hablemos y así dejen de existir.Tenéis que dármela de inmediato para que no caiga en sus manos.
Los niños se quedaron pensativos, pero Elizabeth se dio cuenta de que no era verdad nada de lo que decía, por eso le retó y le dijo: - O sea, que es porque nos quieren ocultar la verdad. ¿Y según tú, qué verdad es esa? -. Al momento, como si de una diapositiva se tratara, empezaron a salir en el aire escenas de lo que posiblemente pasaría, y solamente había pena, tristeza, muerte, desesperación… Acabó diciendo: esto y más va a pasar si no me dais la pluma para poder remediarlo. Continuará.
2 comentarios:
Yo quiero una burbujita de esas para ir a buscar cielos con estrellas llenas de sonrisas.
Se te da muy bien contar historias y vales para ello, no lo dudes.
Continua que vas muy bien.
Mil besitos con alas.
Gracias nena , por tus palabras .
Me gusta mucho , los cuentos eso si que es cierto .
Un besito enorme.
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